Cuando adoptamos un perro nos comprometemos a brindarle los mejores cuidados posibles para que este pueda disfrutar de una vida feliz junto a nosotros.
Si bien gran parte de estas responsabilidades resultan de sentido común, otras puede que no lo sean tanto, sobre todo para aquellos adoptantes primerizos.
Y es que, además de facilitarle agua y comida a diario y sacarlo a pasear con frecuencia, hay otros muchos asuntos de los que te deberás de preocupar para que tu mejor amigo pueda ser completamente feliz a tu lado.
Una cuestión, esta, en la que te queremos ayudar a través de una pequeña guía con algunas recomendaciones básicas para el cuidado de perros.
Cuidados básicos para un perro: todo lo que debes saber antes de adoptarlo
Visita el veterinario
Además de la primera visita que deberás realizar nada más adoptes a tu peludo para asegurarte de que todo está bien es imprescindible que no te saltes ninguna visita, que le pongas el chip, que le pongas todas las vacunas y que no dudes en acercarte al veterinario ante el más mínimo signo de alerta.
Cuida su alimentación
Uno de los aspectos en los que más inciden los veterinarios cuando les preguntan qué podemos hacer para que nuestro perro viva muchos años y disfrute de una salud de hierro durante toda su vida es cuidar su alimentación.
Esto implica facilitarle un buen pienso, de calidad, adecuado tanto a su edad como a su raza, en las cantidades recomendadas y, también, por mucho que cueste, renunciar a facilitarle los restos de nuestras comidas.
Mantén a tu perro en forma
Para que un perro pueda gozar de una buena salud física y mental es capital que este disfrute de una rutina diaria de ejercicio físico.
Eso significa que, además de sacarlo a pasear tres o más veces al día durante no menos de 20 minutos en cada uno de estos paseos, debes intentar que este corra y juegue diariamente, a ser posible junto a otros perros.
Edúcalo bien
Establecer horarios para las comidas y los paseos, enseñarle por dónde puede moverse libremente y por dónde no debe pasar nunca, con qué puede jugar y con qué no o que solo puede hacer sus necesidades fuera de casa son algunas de las cosas que tu perro debe empezar a aprender desde bien cachorro.
Su educación no solo es esencial para garantizar una buena adaptación al hogar, sino también para evitar la aparición de posibles problemas de conducta y garantizar que ambos disfrutáis de una vida feliz juntos.
Premia su buen comportamiento
Pocas cosas hacen más feliz a tu perro que hacerte feliz. Esa es la razón por la que les encanta aprender toda clase de trucos y enseñarte lo bien que lo hacen cada vez que tienen ocasión.
Tanto para premiar sus avances como su buen comportamiento no hay nada como acompañar unas bonitas palabras emitidas en tono cariñoso con caricias y algunas golosinas o snacks para perros.
Haz que socialice
La socialización con otros perros es, sin duda alguna, una de las parte más importantes en la educación de todo perro.
Una tarea en la que debes empezar a trabajar desde el mismo momento en el que llega a casa para que este pueda: empezar a ganar seguridad en sí mismo, evitar la irrupción de miedos irracionales o prevenir la aparición de distintas conductas agresivas en el futuro.
Procúrale un buena higiene
Mantener una buena higiene es básico para que un perro pueda gozar de un buen estado de salud.
Además de tenerlo siempre limpio, aseado y presentable es fundamental que prestes atención con regularidad a sus orejas, su boca y su pelo. Tres zonas especialmente sensibles en los canes y que, a menudo, emiten señales de que algo no funciona correctamente en su organismo.
Dale su propio espacio
De igual manera que tú necesitas disponer de un espacio propio para descansar, tu perro también lo necesita.
Por ello es importante que te asegures de que tu amigo de cuatro patas dispone de una cama, de que esta está colocada en un lugar donde no hay mucho ruido, de que tiene juguetes y una zona para entretenerse con ellos y de que cuenta con un espacio tranquilo para poder comer y beber a gusto.
Regálale tiempo de calidad
Para poder ser feliz tu peludo te necesita a su lado. Y es que no hay nada que haga más feliz a un perro que disfrutar del máximo tiempo de calidad junto a su dueño, lo que implica largos paseos juntos, excursiones, juegos que os impliquen a ambos y, cómo no, muchos mimos y caricias.
Como ves, se trata de nueve cuidados básicos para perros que, con un poco de entrega y dedicación, acabarás integrando rápidamente en tus rutinas diarias.
Así debe ser para que tu perro pueda disfrutar de una vida sana y equilibrada a lo largo de su vida. Todo lo que le des, ya lo verás, te lo devolverá multiplicado por mil.